CULTURA, EDUCACIÓN Y U.POPULAR
CIRCUITO CULTURAL
El teatro español, como el europeo, surge vinculado al culto religioso. Serán los clérigos los que, en su afán didáctico por explicar los misterios de la fe a los fieles mayoritariamente incultos y analfabetos, creen los primeros diálogos teatrales: los tropos, con los que escenificaban algunos episodios relevantes de la Biblia. Estas representaciones, que tenÃan lugar dentro de las iglesias, en el coro o parte central de la nave, se fueron haciendo más largas y espectaculares dando lugar a un tipo de teatro religioso que fue el teatro medieval por excelencia. Poco a poco se fueron añadiendo elementos profanos y cómicos a este tipo de representaciones que, por razones de decoro, terminaron por abandonar las iglesias y comenzaron a realizarse en lugares públicos: en los pórticos y atrios de las iglesias, plazas, calles y cementerios.
Los parámetros medievales seguirán siendo la clave del teatro español hasta que, en el siglo XVI se inicia el camino de la modernización que culminará en la creación de un género: la comedia nueva del siglo XVII.
La obra dramática más importante de este perÃodo es La Celestina de Fernando de Rojas, comedia humanista hecha más para la lectura y reflexión que para la escena
El siglo XVII es el siglo de oro del teatro en España.
La representación pública se convierte en el eje de la moral y la estética
El mundo es un gran teatro y el teatro es el arte más adecuado para representar la vida.
El teatro deja de ser un acontecimiento restringido para convertirse en un producto competitivo, sujeto a las leyes de la oferta y la demanda.
El siglo XVIII estuvo marcado en España, por primera vez, por la intervención del Estado en la orientación teatral del paÃs. Bajo el influjo de las ideas de la Ilustración, se creó un movimiento de reforma de los teatros de Madrid, encabezado por Leandro Fernández de MoratÃn. El cometido principal de este movimiento era recomendar una serie de obras y prohibir otras, bajo la premisa de fomentar exclusivamente ideas que amparasen la verdad y la virtud, apoyando las representaciones que supusieran enseñanza moral o adoctrinamiento cultural. Es preciso señalar que, pese a la censura ejercida, los objetivos de la reforma tenÃan tintes que hoy llamarÃamos progresistas.
El romanticismo español no pasa de ser un movimiento arrebatado, con apenas quince años de presencia en el teatro.-
No obstante, podemos decir que los románticos españoles coinciden, en sus grandes directrices, con los alemanes y franceses: afán de trasgresión, que explica las frecuentes mezclas de lo trágico y lo cómico, el verso y la prosa, tan denostadas por los neoclásicos.
El héroe romántico por excelencia es el protagonista del Don Juan Tenorio de Zorrilla.
A finales del siglo XIX y comienzos del XX no se produce en España la renovación del arte dramático
Un entretenimiento para el público burgués que acude con asiduidad a las representaciones.
La otra tendencia del teatro español de comienzos de siglo es el teatro de carácter popular, el drama social de corte costumbrista que termina derivando en una forma estilÃstica original: el sainete.
Después del trauma de la guerra, los dramaturgos de la posguerra se enfrentaron a una férrea censura que hacÃa difÃcil, sino imposible, ofrecer una visión crÃtica de la realidad.
La escena española actual:
Con la vuelta de la democracia se produjo una renovación del teatro oficial
El énfasis en la revitalización de textos considerados clásicos se ha asociado a una crisis de producción de textos dramáticos originales.
Desde la Universidad Popular esperamos que disfruten de las obras programadas para éste circuito cultural, conociendo diferentes cultural del mundo del teatro, con tÃteres, marionetas, cuentos….
Os esperamos!
Los parámetros medievales seguirán siendo la clave del teatro español hasta que, en el siglo XVI se inicia el camino de la modernización que culminará en la creación de un género: la comedia nueva del siglo XVII.
La obra dramática más importante de este perÃodo es La Celestina de Fernando de Rojas, comedia humanista hecha más para la lectura y reflexión que para la escena
El siglo XVII es el siglo de oro del teatro en España.
La representación pública se convierte en el eje de la moral y la estética
El mundo es un gran teatro y el teatro es el arte más adecuado para representar la vida.
El teatro deja de ser un acontecimiento restringido para convertirse en un producto competitivo, sujeto a las leyes de la oferta y la demanda.
El siglo XVIII estuvo marcado en España, por primera vez, por la intervención del Estado en la orientación teatral del paÃs. Bajo el influjo de las ideas de la Ilustración, se creó un movimiento de reforma de los teatros de Madrid, encabezado por Leandro Fernández de MoratÃn. El cometido principal de este movimiento era recomendar una serie de obras y prohibir otras, bajo la premisa de fomentar exclusivamente ideas que amparasen la verdad y la virtud, apoyando las representaciones que supusieran enseñanza moral o adoctrinamiento cultural. Es preciso señalar que, pese a la censura ejercida, los objetivos de la reforma tenÃan tintes que hoy llamarÃamos progresistas.
El romanticismo español no pasa de ser un movimiento arrebatado, con apenas quince años de presencia en el teatro.-
No obstante, podemos decir que los románticos españoles coinciden, en sus grandes directrices, con los alemanes y franceses: afán de trasgresión, que explica las frecuentes mezclas de lo trágico y lo cómico, el verso y la prosa, tan denostadas por los neoclásicos.
El héroe romántico por excelencia es el protagonista del Don Juan Tenorio de Zorrilla.
A finales del siglo XIX y comienzos del XX no se produce en España la renovación del arte dramático
Un entretenimiento para el público burgués que acude con asiduidad a las representaciones.
La otra tendencia del teatro español de comienzos de siglo es el teatro de carácter popular, el drama social de corte costumbrista que termina derivando en una forma estilÃstica original: el sainete.
Después del trauma de la guerra, los dramaturgos de la posguerra se enfrentaron a una férrea censura que hacÃa difÃcil, sino imposible, ofrecer una visión crÃtica de la realidad.
La escena española actual:
Con la vuelta de la democracia se produjo una renovación del teatro oficial
El énfasis en la revitalización de textos considerados clásicos se ha asociado a una crisis de producción de textos dramáticos originales.
Desde la Universidad Popular esperamos que disfruten de las obras programadas para éste circuito cultural, conociendo diferentes cultural del mundo del teatro, con tÃteres, marionetas, cuentos….
Os esperamos!